lunes, 24 de diciembre de 2012

Génesis


¿Qué puede saber una máquina del olor a hierba mojada por la mañana, o del llanto de un recién nacido? Yo soy la sensación del calor del sol en mi piel: soy la sensación de una ola fría rompiendo sobre mí. Soy los lugares que nunca he visto, y que siempre imagino cuando cierro los ojos. Soy el sabor del aliento de otro, el color de su pelo. Te burlas de mí por la brevedad de mi vida, pero es precisamente ese miedo a morir lo que me infunde vida. Soy el pensador que piensa el pensamiento. Soy curiosidad, soy razón, soy amor y soy odio. Soy indiferencia.Soy el hijo de un padre, quien a su vez era hijo de otro padre. Soy la razón por la que mi madre reía y la razón por la que lloraba. Soy asombro y soy asombroso. Sí, el mundo puede pulsar tus botones cuando pasa por tu sistema de circuitos. Pero el mundo no pasa a través de mí. Se queda en mí. Yo estoy en él y él está en mí. Y soy el medio a través del cual el universo se ha  conocido a sí mismo. Soy eso que ninguna máquina podrá fabricar nunca. Soy el significado.